Tuesday, January 30, 2007

Cuerpo solubles

sin embargo
sé muy bien que al declamar nuestros sexos
el sol se rasgará
por eso cierro las uñas
en las mariposas de las piernas
entro en ti ya vencido
porque ya no sé hablar de mí

*
en mis palabras hay una mano abierta
donde descansar de las errancias
abandonos calculados
clandestinidad de trayectos recorridos
tu cuello
tu boca
tus brazos
tu vientre
tus senos
tus labios
tus ojos
tus piernas
tus cabellos
tu lengua
tus manos
tus muslos
tu cadera
tótems
conugan los ritos inseciados

*
tu cuerpo siempre al límite dela indecencia
tu cuerpo aligerado de las hipnosis
evidencias y fines
en tu voz
hay una historia de evasión sin país
sin destino
sin otro argumento milenario
que la falla de tus labios sobre mi piel

*
del delirio guardamos
la gravedad engarzada del hambre

nunca confesaremos algo más
que la pasión por le peligro a la hora del desayuno
y el múltiple aroma del éxtasis
al retorno craquelado de los rostros

*
en la ciudad que pierde su lugar
el mundo multiplica las horas para nombrar
el borde de tus ojos
sin conseguir cortar
el hilo de las anécdotas que nos preceden
la imagen misma del vértigo


*
en la autobiografía de los cuerpos
me cabalgas con la lengua
la madera seca habla de nuestras costumbres
de tu boca que me vuelve huérfano mil veces
cuando me amas
como se ama otra soledad
una guerra tan grande que es compartida

*
la libertad extrema es la de todos los fracasos
fuiste tú quienme lo dijo
en los malabares en los que envejecemos tan rápido
palmas pizzarras para los misterios
de los que tal vez no regresaré
porque las sábanas sucias
son los ojos que cien veces aquí se reinician

*
pequeña muerte me despido en ti
narrándote el roce de las alas
donde la mano separa en nosotros el nombre de las cosas
los equinoccios

Carl Lacharité
tomado de la revista La voz de la Esfinge